En la ciudad alemana de Schopfheim, una empresa de construcción en madera ha actualizado por completo su taller en tan solo dos años con la moderna tecnología CNC. Y lo ha hecho en una nave que no estaba diseñada para ello. ¿Qué razones han llevado a la empresa M. Räuber Holzbau GmbH a dar el paso de automatizar la producción? ¿Y cómo ha cambiado desde entonces en su taller?
Una inversión de futuro
Durante una visita de la Online-Meisterschule, Christoph Räuber, uno de los dos hijos del propietario Matthias Räuber, conoció la empresa WEINMANN y sus productos, y quedó inmediatamente fascinado por su tecnología de ensamblaje. De vuelta en el taller y tras varias conversaciones, la idea tomó forma. Después de unos cuantos cálculos e investigaciones, así como visitas a otros talleres, la propuesta se hizo realidad y Räuber invirtió en 2016 en la instalación de ensamblaje BEAMTEQ B-560 de WEINMANN. Según sus cálculos de amortización, la instalación de la instalación de ensamblaje debería resultar rentable pero no estaban muy seguros, ya que era la primera inversión que se hacía de este tipo. Hoy, dos años más tarde, no se arrepienten de la decisión. Según Stefan Räuber: "La instalación de ensamblaje merece la pena, sin duda alguna". Uno de los requisitos fundamentales era la integración de la instalación de ensamblaje en el espacio disponible de la nave. Aunque las instalaciones de WEINMANN sean muy compactas y no requieran llevar a cabo tareas de cimentación, se tuvo que comprobar por primera vez la capacidad óptima de integración de la máquina en la nave. Para lidiar con el espacio disponible, la alimentación y la descarga de la máquina se redujeron según las necesidades. De este modo, se podían mecanizar vigas de 13 m de largo. Sin embargo, como Räuber mecaniza a menudo vigas de hasta 14,2 m, se combinó la alimentación y la descarga con una función de exceso de longitud. De esta manera, también se pueden mecanizar vigas de mayor longitud en el mismo espacio. El entusiasmo por la nueva tecnología también fue perceptible entre los empleados, que quedaron fascinados de inmediato por la instalación y sus efectos positivos en el trabajo diario. Gracias a la alta velocidad calculable del mecanizado, se reduce la presión del tiempo. Esto es especialmente importante, porque el tiempo necesario es uno de los factores más importantes y también un factor difícil de calcular, en caso de tareas manuales. Según Stefan Räuber: "Con el ensamblaje con maquinaria podemos calcular el trabajo y los empleados trabajan de manera más sencilla, ya que se elimina la presión extrema". Y esto también se refleja en la nave y en la obra. Además de la mayor precisión, ha aumentado el número de ensamblajes puros y taladros preparados. Con el ensamblaje manual, estas operaciones raramente se realizan debido al gran esfuerzo que suponen. Ahora se fabrican directamente con la máquina. Lo mismo ocurre con los ensamblajes, explica Stefan Räuber: "Con la instalación de ensamblaje volvemos a fabricar más ensamblajes tradicionales porque somos significativamente más rápidos. Además, producimos ensamblajes puros sin elementos de fijación". Así se realizan, por ejemplo, ensamblajes con cola de milano sin elementos auxiliares adicionales. "La instalación abarata los ensamblajes y facilita el trabajo de nuestros empleados. La satisfacción de los empleados durante el montaje en la obra es notablemente superior y, junto con la mayor precisión, se reducen los tiempos de montaje en la obra", afirma Stefan Räuber. "Todos estos efectos nos han permitido obtener unos buenos resultados incluso con una menor utilización. En lugar de tres o cuatro días en la obra, ya solo necesitamos uno o dos".
Los nuevos ámbitos de actividad conducen a una mayor automatización
La instalación de ensamblaje ha influido mucho en el catálogo de productos. Tras conocerse que se estaban realizando ensamblajes de forma automatizada, llegaron dos pedidos de empresas de la región y, con ellos, la entrada en el mercado del ensamblaje por parte de terceros. No solo eso, también ha aumentado la participación en la construcción de marcos de madera, ya que los pedidos de constructores y arquitectos han cambiado. "No habíamos visto tanta madera como en los últimos 2 años", confiesa Stefan Räuber. "Todo el ámbito de actividad ha cambiado mucho, desde el ensamblaje normal hasta la construcción en exclusiva de casas de madera, pasando por las ampliaciones". Partiendo del sector del saneamiento, Räuber ha ido ganando terreno en los sectores de la nueva construcción y de la construcción de marcos de madera, en el que se ha alcanzado una gran utilización. "Éramos capaces de realizar muchos ensamblajes y conseguir un gran rendimiento, pero no llegábamos a la calidad y velocidad adecuadas en la producción de los elementos". Esto llevó a Räuber Holzbau a considerar una automatización de la producción de elementos. Los motivos por los que decidieron invertir en tecnología CNC en este caso también fueron la continua escasez de personal cualificado y la garantía de un nivel de calidad constante y alto. Desde 2017, Räuber Holzbau cuenta con el certificado para la fabricación de elementos de pared cerrados y también ofrece este servicio externo, el cual está cada vez más demandado. Por consiguiente, Räuber Holzbau optó por automatizar también la zona de producción de elementos. Para ello, la empresa invirtió en el puente multifunción WALLTEQ M-380 de WEINMANN, que se combinó con la mesa de montaje BUILDTEQ A-530 que ya tenían en el taller desde 2014. Sin embargo, esta máquina también debía integrarse en el limitado espacio disponible. WEINMANN y Räuber trabajaron en estrecha colaboración para superar este reto. Räuber llevó a cabo pequeñas modificaciones en la plataforma y en las vigas de acero para poder colocar el puente multifunción debajo de la plataforma. Como las puertas de acceso de los edificios de oficinas limitan directamente con el edificio de producción, se tuvo que instalar un sistema de seguridad específico. Unas luces de aviso rojas en las puertas de acceso se iluminan durante el funcionamiento del puente multifunción. Si, a pesar de eso, se tiene que abrir alguna de las puertas, la máquina recibe la señal y se detiene inmediatamente. Esto era muy importante para poder garantizar la seguridad en las rutas de acceso disponibles.
El flujo continuo de datos reduce el índice de errores
La automatización también ha modificado los procesos de planificación y la preparación del trabajo. Anteriormente, todos los planos se trazaban manualmente: por ejemplo, los salientes de plancha o los ángulos para fabricar cortes inclinados se tenían que definir y registrar en los planos a mano. Esto suponía un gran esfuerzo para Räuber y conllevaba un elevado riesgo de error. "Ahora, podemos evitarlo. Los planos se transmiten directamente del CAD a la máquina", señala Christoph Räuber. Los dos hermanos, Stefan y Christoph Räuber, se encargan de la preparación del trabajo. "Tenemos que realizar un mayor esfuerzo en la preparación del trabajo pero, a cambio, la transmisión de los planos a la máquina es más rápida. Además, se producen menos errores porque los datos se transfieren directamente a la máquina. De esta manera, podemos decir que nuestros esfuerzos en la creación de datos se han reducido". Los datos transferidos a la máquina se procesan directamente. Dado que el software y la estructura de mando de la instalación de ensamblaje ya eran conocidos, los empleados pudieron utilizar el puente multifunción inmediatamente sin grandes inversiones en formación y ahora ya están empleando un 35 % menos de tiempo en la producción de elementos. Sobre la mesa de montaje se crea, en primer lugar, el armazón. La mesa está equipada con los topes y las unidades de fijación adecuados para alinear y fijar los elementos. Una vez que el armazón ya está listo, se aplica sobre él el revestimiento que se fija y se mecaniza con los grupos instalados sobre el puente multifunción. El elemento se monta con ayuda de la mesa de montaje y se gira con la grúa de nave. Ahora se realizan las introducciones y se aplica el aislamiento y, a continuación, se cierra, se fija y se realizan los trabajos de mecanizado necesarios en el segundo lado del elemento. Finalmente, el elemento acabado se prepara para el transporte.
Viviendas personalizadas requieren una elevada flexibilidad
Para Räuber, cada casa es diferente, lo que significa que los elementos también son diferentes. Esto fue un factor importante a la hora de realizar esta inversión, pues las máquinas debían cumplir este requisito. El WALLTEQ M-380 se ha diseñado especialmente para ello. El cambiador de herramientas integrado de 12 compartimentos ofrece espacio para diferentes herramientas. Además, pone la herramienta necesaria rápidamente a disposición. Los tiempos de preparación son muy breves y se mantiene la variedad de mecanizados. En caso necesario, Räuber Holzbau emplea una estructura de soporte fija y estable. Sin embargo, dependiendo de las necesidades del cliente, esta puede variar. En los elementos de pared se utiliza a menudo la siguiente estructura: para el lado exterior se utiliza una plancha de fibra de madera blanda como soporte de enlucido; para el aislamiento se utiliza celulosa, que se introduce con una placa de inyección; en el lado interior se introduce, en primer lugar, una plancha OSB como refuerzo y barrera de vapor y, a continuación, la capa de la instalación y las planchas Fermacell.
Espacio optimizado
Así es como Räuber produce hoy en día con la tecnología CNC más moderna y en tan solo 450 m², de los cuales 138 m² son para la producción de elementos, compuesta por una mesa de montaje y un puente multifunción, y 150 m² son para la instalación de ensamblaje. Lo más sorprendente es que la nave se aprovecha mucho mejor que antes. El flujo de material y de producción claramente definido optimiza los desplazamientos en el trabajo y la nave está limpia y ordenada. Además, los trabajos se realizan de forma eficiente y sin ocupar demasiado espacio. Según Christoph Räuber: "Antes, cuando colocábamos los cabrios, necesitábamos una superficie mucho más ancha. Con la instalación de ensamblaje, el flujo de material va directamente desde el almacén hasta la máquina y, desde ahí, a la siguiente estación de trabajo, eliminando así trabajos que se extendían por toda la nave. Lo mismo ocurre con la producción de elementos. La zona de producción disponible es limitada porque el puente multifunción está ubicado sobre la mesa. Los empleados trabajan en esta zona y el resto del espacio queda libre". La automatización también ha influido en gran medida en las secuencias. Los empleados se han familiarizado con la idea de que las zonas de desplazamiento que necesitan están libres y ellos mismos se organizan para hacer que las secuencias sean rápidas y sencillas. Al mismo tiempo, prestan más atención al orden y la limpieza. Christoph Räuber lo resume: "En general, necesitamos menos espacio para la producción que antes". Además de los ya mencionados, la automatización ha tenido otro efecto: los puestos de trabajo son más atractivos y modernos. Stefan Räuber lo describe: "Las nuevas máquinas son también una motivación. Los empleados que trabajan con las máquinas están muy entusiasmados". Esto también tiene repercusiones en la búsqueda de empleados, lo que se manifiesta, entre otras cosas, en el aumento de peticiones para puestos de formación. Räuber nunca había recibido tantas peticiones como hasta ahora. En cada curso se emplea a un estudiante en prácticas: en estos momentos hay dos, pero a finales de 2018 habrá tres. Precisamente en estos tiempos, en los que resulta difícil encontrar personal motivado y bien formado, este es un punto muy importante para Räuber Holzbau.
Más opciones
Con las máquinas, Räuber Holzbau lleva a cabo proyectos que hubieran sido impensables en el pasado. Por ejemplo, hace poco se realizó un objeto individual de más de 10 000 metros lineales. "Las máquinas fomentan el trabajo y ofrecen nuevas posibilidades. Nosotros mismos estamos sorprendidos por la cantidad de opciones y por cómo funciona todo. Cuando observamos cómo trabaja el puente... es simplemente genial", dice Stefan Räuber respecto al trabajo con la nueva tecnología. Un reciente proyecto realizado en Suiza ha demostrado que se han cumplido los requisitos de flexibilidad y velocidad que habían previsto cuando realizaron la inversión. En un plazo de siete días laborables han producido y suministrado una ampliación compuesta por unos 60 elementos, de los cuales 30 fueron de pared y 30 de techo. El proyecto tiene una superficie total de 250 m², 400 m² de superficie de pared y 220 m² de superficie de tejado y techo. Todos los elementos se han cerrado por ambos lados y transportado al lugar de la obra. Estos tiempos de reacción rápidos y flexibles, junto con los breves tiempos de construcción y la alta calidad, proporcionan a Räuber las ventajas que esperaban conseguir con la nueva tecnología. También se valora muy positivamente el desarrollo constante, no solo por el aumento de la demanda procedente de Suiza, sino también de la región, porque la mayor parte de los proyectos se sitúa en zonas cercanas. Esta situación beneficia a las empresas como Räuber, en contraposición a los grandes fabricantes de casas prefabricadas que requieren lentos plazos de entrega. En tan solo 8 semanas desde que se realiza el pedido, Räuber puede construir una casa unifamiliar. También en otros ámbitos como la construcción de viviendas plurifamiliares, las ampliaciones y la construcción comercial, la demanda aumenta y, en los proyectos con características más particulares, Räuber demuestra tener una gran ventaja. "Es lo bonito de esta inversión. Si llegamos por la tarde al taller y decimos que se necesita una pared más, se planifica rápidamente y, una hora más tarde, está lista. Es la flexibilidad que necesitamos y la que nos han proporcionado las máquinas. Estamos muy satisfechos con la decisión que hemos tomado en cuanto a la automatización y sus inversiones correspondientes".
Información sobre Räuber
M. Räuber GmbH, con sede en Schopfheim, es una empresa de construcción en madera que ha realizado cambios y medidas de modernización en los últimos años. Fue fundada en 1989 por Matthias Räuber como un clásico taller de carpintería en Hausen (Wiesental) y tuvo tres empleados en sus inicios. En 1994, se realizó el traslado al nuevo edificio de la empresa en Schopfheim. Allí se sumaron más ámbitos de actividad y aumentó la construcción llave en mano. Los dos hijos de Matthias Räuber, Stefan y Christoph Räuber, entraron en la empresa en el 2002 y el 2005, respectivamente. En 2013 se produjo un acontecimiento importante: un incendio destruyó el edificio por completo. Sin embargo, la familia Räuber decidió reconstruirlo. Así, la nave se terminó en 2014 y, en el 2015, el edificio de administración. Actualmente, este negocio familiar tiene 19 empleados y opera principalmente en los sectores de la construcción de viviendas y las ampliaciones. Al año producen y montan alrededor de 15 casas. Las previsiones de Räuber Holzbau son muy alentadoras, puesto que prevén aumentar el número de casas a 20 por año.
«Con el ensamblaje con maquinaria podemos calcular el trabajo y los empleados trabajan de manera más sencilla, ya que se elimina la presión extrema.»Stefan Räuber